La ardilla cotilla

Una ardilla aburrida inventa historias
Dibujo: Ana del Arenal

La ardilla cotilla vivía en un árbol altísimo y frondoso del bosque. La puerta de su casa era un agujero en el tronco del árbol por el que entraba y salía todos los días para pasear, buscar comida… y, sobre todo, para mirar con curiosidad, y sin que nadie le viera, lo que hacían los otros animales del bosque.

Un día la ardilla cotilla estaba descansando en su casa cuando oyó unos gritos que provenían de fuera. Se asomó con disimulo, por el agujero del tronco, y vio cómo corrían a toda velocidad el conejo, el cervatillo ¡y hasta el caracol! Asustada, e imaginando que estaban huyendo de algún animal feroz, la ardilla cotilla llamó a los papás conejo, ciervo y caracol para avisarles de la desgracia ¡sus crías iban a ser devoradas por una horrible y enorme bestia!

Pero los papás del conejo, del cervatillo y del caracol rieron a la vez cuando la ardilla cotilla se lo contó. Y al unísono le dijeron: “ardilla cotilla, ardilla cotilla, a ver si te enteras mejor de lo que pasa antes de hablar. A nuestras crías no les persigue ningún animal feroz ¡están corriendo porque juegan al pilla-pilla!” ¡Ay, esta ardilla cotilla que habla sin saber!

1 comentario:

  1. Autora: Maria de la Luz Guadalupe Jimenez Ramirez14 de mayo de 2012, 21:42

    Autora: Yo si leo mis cuentos le dan felicidad y vida a mi vida

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